Qué duda cabe de la relación que existe entre la motivación y la productividad. Tal como lo señala el estudio The Workforce View in Europe 2017, elaborado por la empresa ADP, la motivación y el compromiso de los empleados están estrechamente interrelacionados y, como consecuencia, los colaboradores comprometidos son más productivos. Aunque en el compromiso y la motivación de la persona intervienen muchos factores, los encuestados mencionaron el salario y la remuneración como los más importantes. Casi la mitad (47%) afirmó que estos eran los elementos que más les motivaban, claramente por delante de cualquier otro factor.
Después de la remuneración, las relaciones con los compañeros de trabajo fue el segundo mayor factor de motivación, confirmado por casi un tercio (30%) de los colaboradores, seguido de cerca por el buen equilibrio entre la vida laboral y la vida privada (28%) y la valoración o el reconocimiento por parte de los superiores (19%).
En ese sentido, el equilibrio entre la vida laboral y la vida privada se muestra como un elemento crucial para garantizar que los colaboradores puedan mantener sus niveles de productividad y no sufran agotamiento debido a largas horas de trabajo y estrés. Así pues, el 84% de los trabajadores de Europa consideran que tienen un buen equilibrio entre la vida laboral y la privada.
Es importante señalar que buena parte de ese equilibrio pasa por poner a las personas en el centro de la empresa, lo que se traduce en un sentimiento de valoración por parte de ellas, incidiendo directamente en su motivación diaria.
Tal como lo señala el estudio Employee Experience 2022 presentado por Up Spain en abril de este año, el colaborador que se siente valorado y cuidado es un colaborador satisfecho, eficiente y productivo. Por eso, las compañías apuestan cada día más por motivar y cuidar a sus equipos con incentivos y elementos, posicionándose como una de las tendencias de employee experience.
Las empresas, y en concreto los responsables de Recursos Humanos, se encuentran ante el reto de encontrar nuevas fórmulas que les permitan aumentar la satisfacción, el bienestar y la confianza de sus colaboradores como vías para incrementar su productividad y atraer o fidelizar talento.
En otras palabras, no hay mejor forma de aumentar la productividad que sentirse bien con el trabajo que se realiza.
En esta misma línea, el estudio destaca otro aspecto que valoran las nuevas generaciones: la progresión y la formación interna. El saber que pueden entrar en una compañía y empezar desde abajo para acabar teniendo un puesto de mayor responsabilidad, es una de las mejores formas de motivación y retención que posee un departamento o un responsable de recursos humanos. Además, trabajando la relación con los colaboradores de esta forma, se reducen costos relacionados con la contratación y se mejora la productividad al disminuir notablemente el ausentismo y la rotación.
La motivación en Chile
Pese al efecto directo que la motivación de los colaboradores tiene en una mayor productividad de la empresa, en Chile aún hay tareas y desafíos pendientes. Según un estudio publicado en 2019 por la consultora de capital humano Circular RH de Fundación Chile , sólo un 18% de los colaboradores chilenos se encuentran en un estado de alto compromiso y activación con su trabajo, lo que refleja la falta de acción que tienen las empresas en ese plano.
El estudio utiliza como indicador el engagement laboral, que se define como un estado de motivación, activación y compromiso en el trabajo que permite un alto grado de energía, dedicación y absorción.
Entre las conclusiones se señala que será crucial para Chile que sus empresas e instituciones se focalicen en gestionar los ambientes de trabajo para potenciar los recursos disponibles para ellos y controlar las demandas laborales, a través de una gestión estratégica de recursos humanos y la proporción de la autogestión por parte de los colaboradores.
Asimismo, señala que el compromiso de ellos con sus empresas se correlaciona directamente con la productividad que pueden alcanzar.
Sin embargo, la realidad mundial no dista mucho de lo que ocurre en Chile. Según el informe Workforce of 2020 de Oxford Economics, solo el 13% de los empleados a nivel mundial afirma sentirse comprometido, lo que incide directamente y en forma negativa en la productividad y resultados de las empresas.
La investigación señala que son varias las claves para reforzar el compromiso de los trabajadores. La primera de ellas, considerar sus prioridades y preferencias individuales. En este sentido, un aspecto importante es la generación a la que pertenecen. Por ejemplo, los millennials, que se espera que en 2030 constituyan el 75% de la fuerza laboral, se sienten más motivados cuando hay una comunicación abierta, una buena cultura laboral, se sienten realizados y pueden implicarse en causas. Además, desean aprender y prosperar en entornos de trabajo colaborativos.